Los vehículos de hidrógeno se apuntan como una de las principales alternativas en el mercado automotriz. En este artículo hablaremos de los coches de hidrógeno funcionamiento y de sus virtudes.
Funcionamiento de los coches de hidrógeno
Al repostar en puntos de recarga, el hidrógeno se guarda en tanques. A su vez, el contenido de estos depósitos abastece la pila de combustible, en cuyas celdas se inyecta aire. La reacción del oxígeno y del hidrógeno produce energía eléctrica, la cual se almacena en baterías que alimentan al motor. Por otro lado, se obtiene agua, que se expulsa por el tubo de escape en forma de vapor.
Desde los años noventa del siglo XX, la industria automotriz se ha volcado hacia la fabricación de automóviles más respetuosos con el ambiente. Los cambios empezaron con el uso de sistemas de inyección de combustible y de catalizadores más eficientes.
Con la llegada del nuevo milenio, aparecieron modelos que combinaban un motor de combustión con uno eléctrico, conocidos como vehículos híbridos. Por su parte, el segundo decenio ha estado marcado por la producción de coches eléctricos cada vez más económicos como ya predijo esta infografía sobre los autos del futuro. Como resultado, el anhelado índice cero en emisiones de gases tóxicos es ya una realidad posible.
Para la próxima década, se espera un notable incremento en la fabricación de unidades que funcionan con hidrógeno. Por último, cabe mencionar que los vehículos completamente autónomos y los autos voladores estarán en circulación en algún momento de los años treinta o cuarenta del siglo XXI. Serán modelos mucho más eficientes que los actuales y, por lo tanto, más ecológicos.
Ventajas de los coches de hidrógeno
Poseer un vehículo que aproveche el hidrógeno como forma de energía tiene sus ventajas. Hablemos de las dos más importantes.
No contaminan
A diferencia de los vehículos con motor de combustión, que expulsan dióxido de carbono a la atmósfera, el proceso químico que genera energía eléctrica para esta clase de unidades genera agua en estado gaseoso. Por lo tanto, en el departamento de las emisiones de gases nocivos, se trata de un modelo completamente amigable con el ambiente. Quienes conducen un vehículo con estas características en las urbes que imponen restricciones a la circulación pueden usarlo cualquier día.
Recargan combustible rápidamente
Los coches de hidrógeno repostan combustible de forma muy similar a sus contrapartes con motores de combustión. Basta con acudir a una estación de servicio y conectar la manguera a la boquilla de recarga del automóvil. Incluso llenar por completo el depósito no debería tomar más de cinco minutos. En contraste, el proceso de carga de los coches eléctricos puede llegar a demorar varias horas. Así es que, en el mundo de los coches ecológicos, los de hidrógeno son los indiscutibles ganadores en velocidad de recarga.
Los carros con combustible de hidrógeno tienen un gran futuro por delante. El hidrógeno promete convertirse en el combustible más utilizado en la industria automotriz, sobre todo a medida que se logren reducir los costos de producción del mismo y los de fabricación de esta clase de vehículos.